Aunque tu futuro puede llevarte en muchas direcciones, hay habilidades blandas indispensables para cualquier puesto que ocupes. Además de tu conjunto de habilidades básicas, estas competencias resultan beneficiosas en cualquier entorno laboral. Desarrollando estas habilidades blandas, estás construyendo una base para el éxito continuado. Cada campo tendrá requisitos técnicos variados. Pero, estas habilidades blandas apoyarán tu carrera y te desarrollarán como un colaborador importante para cualquier empresa.
- En la mayoría de los puestos hay comunicación diaria a través de reuniones, conferencias telefónicas y correo electrónico. Las habilidades comunicativas te permiten expresarte de forma profesional y significativa, a la vez que te permiten recibir retroalimentación. El centro de la comunicación es el emisor, el mensaje y el receptor. Al comprender cómo pueden recibirse los mensajes, podemos ser mejores transmisores de información. ¿Eres capaz de dar y recibir opiniones? ¿Eres capaz de comunicarte con calma en situaciones urgentes? Son una prueba de tu capacidad para comunicarte eficazmente.
- Un equipo sólido se crea cuando todas las partes trabajan juntas. Desde la base hasta la cima del escalafón, un equipo sólido produce resultados. El trabajo en equipo requiere la capacidad de cooperar con los demás y comprender el papel que desempeña cada miembro. ¿Eres capaz de trabajar bien en equipo? Al desarrollar tu capacidad para ser una parte productiva de un equipo, podrás maximizar sistemáticamente los resultados en un entorno de grupo.
- La resolución de problemas demuestra tu voluntad de resolverlos a medida que surgen. Un buen solucionador de problemas es ingenioso. Intentan encontrar respuestas de forma independiente o mediante una lluvia de ideas.
- La adaptabilidad demuestra la voluntad de ajustarse en entornos cambiantes. Es más probable que un empleado adaptable esté abierto a nuevas ideas. ¿Estás dispuesto a asumir tareas adicionales? Tu capacidad para adaptarte a una carga de trabajo fluctuante ilustra una flexibilidad para satisfacer las necesidades de la empresa.
- La confianza demuestra a los empresarios que tienes conocimientos sólidos. No hay que confundirlo con la arrogancia, un empleado seguro de sí mismo no tiene miedo de aportar ideas productivas, o preguntas, al equipo. Un empleado seguro de sí mismo está seguro de haber hecho su mejor trabajo y eso se nota en su comportamiento.
- La capacidad de completar eficazmente múltiples tareas requiere la capacidad de establecer prioridades en función del nivel de importancia. Tareas aparentemente modestas, muchas personas tienen dificultades cuando se les asigna una nueva tarea con un plazo inmediato. La capacidad de realizar varias tareas a la vez indica a la dirección que eres algo más que un poni de un solo truco. La multitarea y la priorización eficaces demuestran una buena gestión del tiempo y capacidad de trabajo.
- La ética del trabajo es cómo te comportas cuando crees que nadie te está mirando. Los empresarios quieren saber que no tomarás atajos cuando creas que nadie te presta atención. Los empleados con una buena ética de trabajo son difíciles de encontrar. Mucha gente se contenta con asistir al trabajo. ¡Los empresarios buscan colaboradores! Personas dispuestas a tomarse el tiempo necesario para realizar un gran trabajo. Establecer tu voluntad de ir más allá para hacer el trabajo revela una buena ética laboral.
Denominadas “habilidades blandas”, estas competencias son esenciales para el éxito de cualquier empleado. Dedicando tiempo a desarrollar estas habilidades, podrás destacar tus talentos más allá de lo técnico.